noviembre 01, 2007

Perón y El Exterior

Nada define mejor la parábola recorrida por Perón durante su gobierno como el análisis de su política internacional. El triunfo de 1946 había sido la victoria del sentimiento nacional herido por la intromisión del Departamento de Estado en nuestra política interna. La política internacional de Perón se movía dentro de límites cada vez más estrechos a medida que la situación del país tendía a deteriorarse. En suma, Perón se movió con toda la relativa independencia que le permitían las relaciones coyunturales del mundo, en el contexto del pico más álgido de la "guerra fría". En el campo de la política internacional quedó como saldo el mantenimiento del principio de autodeterminación de los pueblos y la solidaridad con los pequeños países, que contribuían a fortificar la conciencia nacional e individualizar la posición argentina en el mundo. El poder internacional que regia el mundo, lo que Perón llamaba la sinarquía internacional, esto es el poder financiero, el poder militar y el poder propagandístico del nuevo orden surgido de las guerras mundiales, los factores de poder que se repartían el mundo e intentaban, de acuerdo al plano general de la época, explotar la parte que les tocaba a cada uno. Es decir, que para Perón no había política chica, de país aislado, sino una política que solo podía pensarse y actuarse a escala mundial. Para Perón era necesario articular un poder continental con los países
sudamericanos para enfrentar el poder hegemónico del nuevo orden y defender
efectivamente los derechos de los habitantes de nuestros países contra la
voracidad imperial. Su proyecto del ABC con el Brasil de Getulio Vargas y el
Chile de Ibáñez del Campo y aun más, su política de la tercera posición, su
relación con los países del medio oriente, muestran a Perón actuando como un
estratega de alcance mundial.

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“…Por esa razón, es necesario que todos los trabajadores argentinos sean, permanentemente, difusores de nuestra doctrina. Que sean ellos los millones de verdaderos predicadores que la Patria necesita para elaborar su triunfo final…” Juan Domingo Perón.